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Jueves 20 de Abril de 2017
A medida que pasa el tiempo y envejecemos, nuestra piel va perdiendo firmeza, tersura y elasticidad, mientras se produce la pérdida de colágeno y grasa facial. En resumidas cuentas, aparece la tan indeseada flacidez y también arrugas. Las zonas más afectadas de nuestra cara suelen ser las mejillas, cejas, contorno de los ojos y también cuello y papada.